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El streamer y creador de contenido Norme se ha visto en el centro de la controversia tras intentar un reto peligrosamente ambicioso: mantenerse despierto durante 12 días seguidos. El viaje sin dormir de Norme duró unas asombrosas 265 horas (más de 11 días) antes de que finalmente lo eliminaran de varias plataformas, incluidas Twitch y Kick, debido a preocupaciones por autolesiones. Ahora, en un giro dramático, Norme está de vuelta en Twitch, intentando romper el récord mundial de la "transmisión con sueño más larga".

El objetivo inicial de Norme era superar el famoso récord de 1963 establecido por Randy Gardner, quien pasó 264 horas y 24 minutos sin dormir. La hazaña de Gardner sigue siendo uno de los casos mejor documentados de privación del sueño y, si bien ha habido otros intentos de romper este récord, muchos involucraron el uso de estimulantes. Norme, sin embargo, afirmó haber completado su carrera sin ninguna de esas sustancias, lo que hace que su intento sea particularmente extremo.

La decisión de prohibirle a Norme el acceso a Twitch y Kick probablemente se debió a las preocupaciones sobre los graves riesgos para la salud asociados con la privación prolongada del sueño. Pasar períodos prolongados sin dormir puede tener consecuencias fatales y, en vista de estos peligros, Guinness World Records ya no acepta solicitudes para batir récords de privación del sueño. La incertidumbre en torno a la salud de Norme durante el desafío probablemente impulsó a las plataformas a tomar medidas para evitar posibles daños.

A pesar de las prohibiciones, Norme regresó rápidamente a la escena del streaming con una nueva cuenta de Twitch, "normeisback", donde ahora persigue un objetivo mucho menos peligroso: el streaming más largo durmiendo. Al momento de escribir este artículo, Norme ya superó las cuatro horas en su búsqueda del récord. Dada la novedad de esta categoría, está a punto de convertirse en el poseedor del récord mundial si continúa durmiendo unas horas más.

El viaje de Norme sin dormir estuvo lejos de ser tranquilo, ya que implicó visitas a ambulancias e incluso intervenciones del equipo SWAT. Estos incidentes ponen de relieve los extremos a los que llegó en su búsqueda del récord. Sin embargo, es importante señalar que, si bien el intento de Norme fue impresionante, no alcanzó la racha sin dormir más larga registrada, que pertenece a Robert McDonald, quien se mantuvo despierto durante 18 días y 21 horas con la ayuda de la cafeína.

La transición de Norme de un peligroso desafío de privación del sueño a una transmisión de sueño récord es un testimonio de la resiliencia y la creatividad de los creadores de contenido en el mundo del streaming. Ya sea que logre o no establecer un nuevo récord, su historia sirve como recordatorio de la importancia de priorizar la salud y la seguridad en la búsqueda de la fama en Internet.

Etiquetas: Bitel Gamind Norme